Ayer se subían 5 puertos de montaña, cuatro de primera categoría
con la llegada en alto a la Farrapona. En los kilómetros finales, después de
horas sentados en la bici, Contador aguantó varios ataques de Froome hasta que
al final le dio el golpe de autoridad de un Campeón. ¿Parece normal? ¿Y si te
dijera que hace menos de dos meses se fracturó la tibia? Este ciclista no está
hecho de otra pasta. Este Contador es de la raza de Aquiles.
Para los que no conozcáis bien, bien a Contador aquí se
viene su historia:
Desde pequeño siguió la afición de su hermano mayor por las
bicis, incluso intentaba ir con él pero recibía negativas. “Te vamos a dejar
tirao”. Un día, harto de tanta palabrería, el de Pinto siguió a su hermano y
sus amigos. “Pues va a resultar que tu hermanillo es bueno. Mira cómo nos
aguanta. Cómo aguantaba…hasta que un día ya dejó de aguantarnos” dice el
hermano “nos dejó tirados a nosotros”.
Este es el reflejo de su vida. Esta historia. Necesitaba
explicarla para que supierais por qué ha ganado hoy, por qué ha ganado las tres
grandes carreras ciclistas. Es un cabezón, si le dices que no puede lo hace. Es
puro músculo…no. Es pasión, es fuego en el asfalto, es ganas de ser historia.
Otros especulan, Contador ataca, juega, disfruta encima de la bici. No trabaja,
pedalea hasta la gloria.
Otra historia dura, cruel, fue el cavernoma cerebral que sufrió
en 2004 en la Vuelta a Asturias. Fue operado y perdió un año en rehabilitación.
Dos años después ganaría el Tour; no lo hizo antes por el maldito cavernoma.
¿Qué escusas te quedan? Este hombre ha sufrido reveses tras reveses y ha
seguido adelante, alcanzando gloria tras gloria. A tus pies Alberto Contador.
0 comentarios:
Publicar un comentario