Parece que la actuación normalita de Iker Casillas no ha cerrado debates. Mientras su sector de apoyo alza las voces diciendo que ha resucitado, que hizo una gran actuación, los entendidos saben que no pasó de ser un partido normal. Las ocasiones no fueron excesivamente claras y todos los tiros fueron al muñeco. ¡Para mearse si no para las que van al centro! Solo faltaría que le atravesaran el cuerpo, con razón le llaman el Transparente.
La prensa que tanto le apoya lo sabe, por ello están otra vez en las trincheras, escribiendo y recalcando en sus artículos que ahora Casillas parte con ventaja para ser titular. Recalcan que Keylor lleva poco tiempo y que se la juega en el próximo amistoso del sábado. Presión añadida para el costarriquense, quien no podrá cometer un fallo o los buitres saltarán sobre él.
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